Hace un tiempo, estábamos con unos amig@s y descubrimos que estando todos juntos, cualquier problema que se nos planteara, ya fuera matemático, de orientación geográfica, discusiones con alguien, hacer una actividad o una idea, etc, siempre alguno aportaba la solución. Era maravilloso. Cualquiera tiraba un problema X, y pronto surgía una solución del grupo.
Medio en broma, medio en serio, a esa facultad que tenía nuestro grupo de resolver cualquier problema la llamamos “la ley de los ocho”, y postulaba que, ocho personas pueden resolver cualquier inconveniente que se presente.
Bueno, la cuestión es que años mas tarde, conocí la Teoría de las inteligencias múltiples elaborada por el Psicólogo Howard Gardner, donde se expone que, casualmente, los diferentes tipos de inteligencias humanas ¡son ocho!
Para este profesor norteamericano de Harvard, la inteligencia es la capacidad de resolver problemas o elaborar productos útiles, y la teoría postula que todos los seres humanos están capacitados para desarrollar ampliamente algún tipo de las ocho inteligencias. Por eso, no está de mas conocer un breve resumen de las características de cada una, ya sea, tanto para conocerte a vos mismo, como a los que te rodean.
Acá van:
Inteligencia lingüística: es la que poseen los escritores, los poetas, los redactores de los diarios. Son personas sensibles, pero lo suficientemente racionales como para poder describir, por escrito, la emoción o las imágines vistas o imaginadas.
Inteligencia lógico-matemática: es la que se utiliza para resolver problemas de lógica y matemáticas. Es la inteligencia que tienen los científicos, y todos aquellos que poseen sensibilidad para realizar esquemas y relaciones lógicas. Un ejemplo son las pruebas que miden el cociente intelectual. De ahí que esta inteligencia se corresponda con lo que la cultura occidental ha considerado siempre como la única inteligencia.
Inteligencia espacial: es la que consiste en formar un modelo mental del mundo en tres dimensiones; es la inteligencia que tienen los ingenieros, pintores, los escultores, los arquitectos o los decoradores.
Inteligencia musical: es la que permite desenvolverse adecuadamente a cantantes, compositores, músicos y bailarines. También facilita el escuchar y juzgar la música.
Inteligencia corporal-cinestésica: es la capacidad de utilizar el propio cuerpo para realizar actividades o resolver problemas. Es la inteligencia de los deportistas, los artesanos, los cirujanos y los bailarines.
Inteligencia intra-personal: es la que permite entenderse a sí mismo, comprender las emociones y obrar en consecuencia. No está asociada a ninguna actividad concreta.
Inteligencia inter-personal: es la que permite comprender a los demás; se la suele encontrar en los buenos vendedores, políticos, profesores, sacerdotes y psicólogos.
Inteligencia naturalista: Es la facultad de saber organizar, clasificar y ordenar las observaciones que se hacen sobre el mundo, en especial, sobre la Naturaleza. Es la que demuestran los biólogos o los herbolarios. Pero también, toda persona con tendencia al orden y la clasificación de cosas.
En fin, me imagino que te habrás identificado con alguna de estas inteligencias. Por mi parte, , acuñé como norma de vida que es importante escuchar al otro, porque siempre será mas inteligente; al menos en otra inteligencia. A mi me suele funcionar, y me alegro muchísimo cuando compruebo que los otros ven cosas que yo no veo, y viceversa.
Esto conecta con aquello que alguna vez vimos en La ventana de Johari